En sus siete años de ejecución, con financiamiento de FIA, esta entidad —que agrupa a los principales actores de la cadena— ha desarrollado iniciativas de investigación e innovación que apunten a mejorar la competitividad y sustentabilidad del rubro.
Más de 30 iniciativas de investigación e innovación en las áreas de gestión predial, praderas, forrajes y alimentación, ganado lechero, industrialización, mercado, formación de Recursos humanos y gestión ambiental, ejecutó el Consorcio Lechero en estos últimos siete años, cerrando así su primera etapa con cofinanciamiento de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), del Ministerio de Agricultura, con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC).
Esta entidad, integrada por Fedeleche, Colún, Watt’s, Nestlé, Soprole, Surlat, Cooprinsem, Bioleche, Todoagro, Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), Universidad Austral de Chile (UACH) y Veterquímica, se conformó con el objetivo de mejorar la competitividad y sustentabilidad de la producción lechera nacional, a través de la formación de especialistas y la generación de información y herramientas de análisis para el sector.
Además, desde el inicio el Directorio del Consorcio decidió que la organización debía focalizar sus actividades en la generación de “información tecnológica sectorial”, basada en investigaciones e innovaciones, y no fundamentar su sustentabilidad en la venta de productos tecnológicos, como patentes, servicios, etc.
“Hemos innovado con la puesta en foco de inquietudes o desafíos tecnológicos y nos hemos hecho cargo de apoyar proyectos de investigación y de extensión para poder llegar con la tecnología hasta el usuario a través de seminarios, publicaciones y días de campo. Este es un trabajo permanente para aportar en competitividad. El apoyo de FIA ha sido fundamental para ayudarnos a acercar a los actores de la cadena a trabajar unidos y, a la vez, para generar acciones y productos que busquen beneficios colectivos para toda la cadena, con una mirada amplia y de país”, destaca el gerente del Consorcio Lechero, Sebastián Ganderats.
El principal interés de los socios se definió en la entrega de información validada a los empresarios productores, que les permitiera cubrir la brecha tecnológica existente en los niveles de producción y la calidad de la leche, para su procesamiento y diversificación productiva industrial.
En este contexto, el Consorcio Lechero comenzó a asumir durante su ejecución roles de articulación al interior de la cadena láctea. El primer hito del Consorcio en su rol articulador fue la publicación de la primera mirada estratégica sobre el desarrollo de la cadena láctea nacional denominada “Estrategia de Desarrollo Competitivo del Sector Lácteo Chileno 2010-2012”. En ella, se acordaron los ámbitos y objetivos que deben ser abordados durante los próximos 10 años, para el mejoramiento de la competitividad del sector.
También en la línea de aportar mayores conocimientos a la cadena, en 2010, el Consorcio asumió la secretaría del Comité Nacional de la International Dairy Federation (IDF-FIL). Este es un organismo que representa los intereses del sector lácteo a nivel mundial, al cual pertenecen 58 países lecheros.
El acceso a los resultados de los proyectos ejecutados por la IDF-FIL, así como la vinculación con dicha red de especialistas, son dos de los principales beneficios de esta participación. En el marco de este trabajo, el Consorcio organizó y coordinó grupos de profesionales pertenecientes a centros tecnológicos, empresas lácteas, universidades e institutos de investigación. El objetivo es disponer de un soporte técnico especializado para el sector lácteo chileno y contar con una contraparte para los grupos de trabajo de la IDF-FIL a nivel mundial.
Articulador sectorial
En términos de organización, el Consorcio cuenta con un Departamento de Investigación y Desarrollo, el cual tiene el rol de priorizar los proyectos para el sector y buscar las mejores instituciones que los ejecuten. Además tiene la responsabilidad de manejar información técnica de alto nivel e identificar y mantener contacto con especialistas nacionales e internacionales.
También dispone de un Departamento de Extensión orientado a mejorar la adopción de tecnología y las habilidades del sector; apoya a las empresas e instituciones en la difusión y transferencia de resultados relevantes para el sector lechero; y da soporte al trabajo de los extensionistas nacionales.
“La formación del Consorcio Lechero es de gran valor para el sector lechero nacional. Es una organización con un alto grado de representatividad, constituida por los actores más relevantes del sector y que hoy día tiene como misión ser el articulador del desarrollo competitivo de la cadena láctea nacional”, explica la ejecutiva de innovación de FIA y supervisora del Consorcio, Natalia Díaz.
Agrega que esto permite definir cuáles son los temas realmente importantes para el sector y su competitividad, a través de una mirada conjunta y consensuada de todos los actores. “El Consorcio —agrega Díaz— facilita la priorización de ámbitos de acción y permite alinearlos y coordinarlos de mejor forma”.
Para asegurar su permanencia futura, la entidad estableció un sistema de recaudaciones de aportes privados, a través del bono de desarrollo, que ha permitido que funcione con presupuesto propio.
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